FIGURAS de ayer y de hoy

 

DOMÉNICO ZÍPOLI

El legado oculto (x)

por: César González P.

 

 Por muchas razones la figura de Doménico Zípoli (1688-1726) está ligada al patrimonio musical que legaron las Reducciones Jesuíticas. Nacido en Prato (Italia) y dueño de una sólida formación musical con maestros de la talla de Alessandro Scarlati y reconocido por su talento como compositor, su vida cambió de manera radical cuando, motivado por la vocación sacerdotal, viajó a Sevilla (España), donde ingresó a la Compañia de Jesús. En 1717 partió una expedición, organizada  por los jesuitas, rumbo al Río de la Plata. Tenían como misión trabajar en las ya célebres Reducciones Jesuíticas del Paraguay. La enorme provincia virreynal abarcaba incluso el Convento de los Jesuitas en Córdoba, lugar donde se estableció.

En los ocho años y cinco meses de actividad en las Reducciones, Zípoli compuso una gran cantidad de música que luego se enviaba, por medio de emisarios, a los treinta pueblos que formaban parte de las Reducciones. Cuando España ordenó la expulsión de los jesuitas, en 1767, la mayor parte de  sus composiciones fueron destruidas.

Fue recién en 1959 que el musicólogo estadounidense Robert Stevenson halló en Sucre (Bolivia) copias de su Misa en Fa, copiada en Potosí a pedido del Virrey de Lima. En 1972; en la Reducción de Chiquitos (Bolivia), se encuentran más de diez mil manuscritos, un hallazgo considerado como trascendental para el conocimiento de la musicología hispanoamericana. Entre esos manuscritos se pudieron rescatar obras de Zípoli, como Misas, Motetes, Himnos y piezas de órganos.

Pero todo ese material esta sin clasificar. Fue el maestro Luiz Szarán, en Paraguay, quien inició la recopilación, construcción, publicación e interpretación de las composiciones de Zípoli a través de un centenar de conciertos llevados a cabo en el país y en el exterior, como Argentina, Uruguay y Brasil; en la Exposición Universal de Sevilla, de 1992; en el Auditorio Nacional de España, en 1995, se verificó el estreno mundial del conjunto de Vísperas Solemnes.

En nuestro país podemos apreciar la labor de Luis Szarán en un compacto titulado ”Música de las Reducciones Jesuíticas”. Así pudimos acercarnos a un patrimonio invalorable, que habla del legado musical de un hombre que, de no ser por los estudiosos, podría haber quedado en el olvido.

Zípoli murió en Santa Catalina (a 50 kilómetros de Córdoba) a los 38 años de edad, de teberculosis. A quienes deseen ahondar en la vida de este músico recomendamos consultar el Diccionario de la Música en el Paraguay, de autoría de Luis Szarán.

 (x) Del diario ÚLTIMA HORA (El Correo Semanal), 1-2 de enero de 2000 (Asunción,Paraguay)